viernes, 5 de agosto de 2016

Primeras impresiones de "Cuando yo tenía cinco años, me maté"

Cuando yo tenía cinco años, me maté

Esta es una lectura que inicié el día miércoles. Como las mejores lecturas después de tanto tiempo de inactividad, llegó a mí por pura casualidad. O más bien, solo llegó. 

Estuve varios días merodeando las estanterías de la biblioteca, tomando y hojeando algunos libros. Prestando otros con la esperanza de dedicarme a ellos, pero lamentablemente no fue así. Esta semana hice lo mismo y a leer el título de este libro, quise desecharlo de inmediato porque lucía pretencioso, pero al mismo tiempo impactante y por curiosidad me leí su sinopsis, me llamó la atención, aunque no mucha pero después de hojear más libros y no dar con algo que me satisficiera decidí darle una oportunidad.



El libro tiene un lenguaje bastante sencillo, teniendo en cuenta que el narrador es un niño de ocho años, pero además la traducción al español es bastante neutral por lo que de cierta forma resulta algo formal, pero hasta ahora no molesta o incomoda.

El niño, Burt, que se presume es un sujeto asocial, logra crearme una empatía con él hasta resultarme alguna de sus acciones graciosas mientras pienso ¡pero es un niño, es muy obvio que haga esto o pienso aquello! Es precisamente aquella inocencia la que me lleva a mi propia infancia y me hace querer recordar aquellos momentos y esa imaginación con la que se veía la vida.

El libro pinta bien, y deseo seguir leyéndolo. En hora buena.


No hay comentarios:

Publicar un comentario